El café fue descubierto en Etiopía y las autoras de su descubrimiento fueron... ¡unas cabras! Al menos así es como nos lo cuenta la leyenda, recogida por primera vez en 1671 por el profesor Antoine Faustus Nairon, en su tratado De saluberrima potione cahue seu cafe nuncupata discurscus. Según esa historia, fue un pastor etíope llamado Kaldi quien se percató de que sus cabras se excitaban notablemente después de comer unas bayas rojas en el bosque. El pastor quiso comprobar si su teoría era cierta, si eran aquellos frutos los causantes de tal agitación en sus animales, y él mismo masticó varios granos. Tras experimentar una increíble sensación, Kaldi sintió que debía ir a comunicar el descubrimiento a alguien y acudió al monasterio más cercano. Se presentó allí con unas cuantas bayas en la mano para poder probar lo que decía, pero el monje que lo recibió apenas quiso escucharle. Creyendo que se trataba de algo maligno o reprobable, lanzó los frutos directamente al fuego. Poco a poco las bayas comenzaron a arder, desprendiendo un delicioso aroma, y el monje pareció entonces interesarse por ellas. Recogió algunos granos y los mezcló con agua caliente, dando lugar a... ¡la primera taza de café del mundo!
Desde entonces, el interés de la humanidad por el café no ha hecho más que crecer. Hoy es el segundo producto más exportado del mundo, sólo por detrás del petróleo. No cabe duda de que el café tiene luces y sombras, pero a medida que avanzan las investigaciones parece que sus beneficios son mayores que sus perjuicios. En seguida te damos 10 buenas razones del porque tomarlo. 1. Nos mantiene alerta
Muchos estudios realizados en humanos muestran que el café mejora varios aspectos de la función cerebral. La cafeína es el componente más importante del café, y el psicoactivo más consumido del mundo. Actúa en el cerebro bloqueando un neurotransmisor: la adenosina, que hace que aumenten otras sustancias como la dopamina o la norepinefrina, las cuales aceleran la actividad cerebral, mejorando la memoria, el ánimo, la vigilancia, los niveles de energía, los tiempos de reacción y la función cognitiva general. A cambio de estas ventajas el café nos mantiene despiertos por más tiempo, lo que puede provocar trastornos del sueño. Por eso la mayoría de expertos recomiendan no tomar más de cuatro tazas al día. 2. Mejora la digestión El café, tomado como bebida después de una comida, puede ser una excelente forma de favorecer la digestión. El café tiene la capacidad de aumentar la producción de jugos gástricos, gracias a la acción de las sustancias aromatizantes que se producen durante el tostado. Estas sustancias son capaces de actuar sobre la movilidad intestinal. Motivo por el que, además, el primer café de la mañana también puede ser un excelente remedio para combatir el estreñimiento. 3. Mejora nuestro rendimiento físico
Muchos atletas toman varias tazas de café antes de competir, ya que la cafeína aumenta los niveles de adrenalina. Esta hormona prepara a nuestro cuerpo para un esfuerzo físico excepcional: hace que las células grasas descompongan la grasa corporal, liberándola como ácidos grasos libres, que usamos como combustible cuando hacemos ejercicio. 4. Contiene nutrientes esenciales Solemos pensar en el café como una simple mezcla de agua y cafeína, pero la infusión tiene muchos otros nutrientes esenciales para nuestro organismo. Una taza de café contiene riboflavina (vitamina B2), ácido pantoténico (vitamina B5), manganeso, potasio, magnesio y niacina. Y aunque no lo creas, el café es, además, la mayor fuente de antioxidantes de la dieta occidental, pues tiene más que la mayoría de frutas y vegetales. 5. Disminuye el riesgo de padecer diabetes
La diabetes de tipo 2, la más frecuente, puede prevenirse con unos hábitos de vida saludables: manteniendo un peso correcto y haciendo ejercicio. Pero la cafeína también parecer jugar un papel en la ecuación. Diversos estudios han mostrado que la gente que consume café tiene un riesgo entre un 23 y un 50% menor de padecer diabetes. Hay investigaciones que elevan este efecto hasta un 67%. El por qué ocurre esto no acaba de estar claro, pero hay suficientes investigaciones para afirmar que, sea como sea, el café parece prevenir la aparición de la enfermedad. 6. Disminuye la posibilidad de sufrir enfermedades neurodegenerativas Hasta la fecha no existe ninguna cura para la enfermedad de Alzheimer y el párkinson, las dos principales enfermedades neurodegenerativas, y cada vez son más comunes debido al progresivo envejecimiento de la población. Además de los hábitos de vida saludable, que parecen prevenir la aparición de ambos trastornos, parece que el consumo de café también influye en su desarrollo. Diversos estudios muestran que los bebedores de café podrían tener un 65% menos de posibilidades de padecer alzhéimer, y entre un 32 y un 60% de sufrir párkinson. Parece que la cafeína es la principal responsable de esto, ya que los bebedores de descafeinado no muestran ninguna ventaja. 7. Protege el hígado de padecer cirrosis
El hígado es nuestra víscera más voluminosa y la que más funciones cumple en nuestro organismo. Una de las enfermedades más comunes en éste es la cirrosis, íntimamente relacionada con el alcoholismo, aunque también con la hepatitis. Su relación con el café está en que el beber más de 4 tazas de café al día tiene un 80% menos de posibilidades de padecer la dolencia. 8. Combate la depresión Según un estudio de la universidad de Harvard, el riesgo de sufrir depresión disminuye cuando aumentamos el consumo de café, al menos en las mujeres, que es con las que se realizó el estudio. Las mujeres que consumieron cuatro o más tazas de café al día desarrollaron la depresión en un 20% menos. De nuevo, la cafeína es la responsable de esta reducción, ya que las mujeres que consumían descafeinado no mostraron ninguna mejora. Por otro lado, el consumo moderado de café, puede reducir de manera significativa las probabilidades de suicidarse. Según señala el grupo de investigadores de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard en Boston, aquellos que toman café a diario se suicidan hasta un 50% menos que las personas que no consumen dicha bebida en absoluto o que toman café descafeinado. La cantidad propicia se encuentra entre las dos y cuatro tazas de café al día. 9. Reduce el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer
Un grupo de investigadores de la Sociedad Americana para la Nutrición encontraron que el consumo de café reduce el riesgo de sufrir cáncer de colon. El estudio fue llevado a cabo en más de medio millón de personas y descartó los beneficios del descafeinado. Finalmente, un estudio sueco vinculó el consumo elevado de cafeína (cinco o más tazas diarias) con la reducción del cáncer de mama. 10. Puede reducir el riesgo de sufrir un infarto Es conocido que la cafeína aumenta la presión sanguínea, pero no aumenta el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular, sino todo lo contrario: parece que previene los infartos. Una de las máximas autoridades académicas en esta materia, el profesor Peter Martin, que dirige el Instituto de Estudios del Café en la Universidad de Vanderbilt, ha criticado la "asociación errónea" entre la cafeína y las enfermedades cardíaca. La publicación de un informe que recoge varios de los estudios realizados durante la última década precisa una fuerte relación entre el consumo en cantidades moderadas de café con una reducción del riesgo de padecer insuficiencias cardíacas. Unos beneficios que solo desaparecerían si se consumen más de cuatro o cinco cafés al día.
Estas son tan sólo 10 razones para disfrutar de una taza de café, sin prisas, y sacandole el máximo partido a sus beneficios. La clave esta pues, en beberlo con moderación, porque de nada serviría excedernos en su consumo. Fuentes: |